viernes, 17 de diciembre de 2010

Pulp Fiction revisited

Pulp Fiction es una de mis películas favoritas, la habré visto... no sé, unas... dos veces exactamente. La primera, en el cine, y la segunda, hace unos días. La razón de que no la haya visto más veces es bien sencilla: a mi santa esposa el humor de Quentin Tarantino no le resulta gracioso y encontrar el momento adecuado para una película tan peculiar no es fácil y la verdad, tenía otras cosas en que pensar.

Bueno, vamos al lío.

Pulp Fiction, o cómo organizar una trama alrededor de un retrete.

1. Vincent Vega sale con Mia a cenar a un restaurante de ambiente años 50. Al volver a casa, Vincent va al baño, momento que aprovecha Mia para curiosear su chaqueta, consumir parte de su droga y ponerse para morirse.
2. Butch vuelve a su casa a recoger su reloj de oro, que la idiota de su novia, Fabienne, ha olvidado irresponsablemente en su casa. Allí le espera Vincent para liquidarlo, pero oh sorpresa, Butch llega justo en el momento que que Vincent está en el baño. Gracias a ese pequeño detalle, Butch logra liquidarlo.
3. De vuelta en el apartamento en que Vincent Vega (de nuevo vivo) y Jules han ido a casa de los jóvenes que han robado el maletín de Wallace. Del (cómo no) baño, sale un hombre que les dispara repetidamente sin darles, lo que hace que Jules vea la luz y decida cambiar de vida.
4. Jules y Vincent están en la cafetería donde empieza la peli. A Vincent le pilla todo el fregado de los atracadores ¡en el baño! creando una situación idealmente narrable.

Así que con cuatro pipís y/o cacas, y flashbackqueando a tutiplén ya tiene usted una obra maestra.

1 comentario:

  1. Es difícil leer un artículo más corto y certero sobre una película. Suscribo especialmente las últimas dos palabras :)

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